MARJAL DE CASTELLÓN

Divulgación del ecosistema de la marjal de Castellón.

6 de abril de 2013

EL GALÁPAGO DE FLORIDA SE IMPONE (LEVANTE-EMV)

El galápago de Florida se impone (LEVANTE-EMV) Nacho Martín 01.04.2013 | 00:00 La Marjaleria de Castelló es uno de los ecosistemas que conservan en Castelló población de galápagos. Estudio de Medio Ambiente en la Marjaleria de Castelló. Los últimos informes de la Conselleria de Medio Ambiente desvelan un aumento sin precedentes en la zona húmeda de la capital de La Plana del galápago de Florida, una especie invasora que está empezando a desplazar al galápago europeo autóctono. La presencia del galápago de Florida como especie exótica invasora en la Marjaleria ya multiplica por 10 al galápago europeo debido a un aumento sin precedentes en los últimos cuatro años, según datos recogidos por la Conselleria de Medio Ambiente. Estos estadísticas quedan reflejados en los últimos informes de la Dirección General del Medio Natural relativos a los resultados obtenidos en la colocación y seguimiento de trampas de control poblacional y muestreo. A este respecto, se ha constatado un crecimiento de cerca del 800% en un periodo de menos de cuatro años debido al incremento de los esfuerzos de muestreo y, muy especialmente, a un aumento de los ejemplares existentes en los humedales de la capital de la Plana. En 2009 se contabilizaron 148 ejemplares de este galápago exótico (también conocido como "Trachemys scripta" o tortuga de orejas rojas), en 2010 el número se elevó a 594, en 2011 a 699 y en 2012 a 884. Estos datos contrastan con la escasa población de galápago europeo, la especie autóctona que en los últimos años se ha visto desplazada por una confluencia de factores. En primer lugar, destaca la degradación y desaparición de humedales debido a la construcción, la contaminación y la expansión urbanística. Un segundo factor menos decisivo ha sido la captura ilegal y un tercero es el crecimiento de especies invasoras como el galápago de Florida. Una de las principales causas de esta expansión es la proliferación de mascotas exóticas que posteriormente son abandonadas y en ocasiones incluso introducidas en un ecosistema ajeno. En otros casos, la citada introducción es incluso no intencionada y llega como resultado de, por ejemplo, el intento de deshacerse del animal a través del inodoro. El resultado final es que los muestreos de galápago europeo arrojan unas cifras de 57 ejemplares en 2009, 72 en 2010, 132 en 2011 y 84 en 2012. Década de los 80 La literatura científica indica que la venta de galápagos se inició en España alrededor de la década de los 80, pero se consolidó y se extendió de forma masiva en los 90, momento en el que comenzó a ser frecuente la liberación de estos reptiles exóticos en el medio natural. La actual Ley 42/2007 del Gobierno Español del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad hace referencia a un catálogo de especies exóticas invasoras para las que se establece la prohibición genérica de posesión, transporte, tráfico y comercio de ejemplares vivos o muertos, de sus restos o propágulos, incluyendo el comercio exterior. Aún así, estas tortugas siguen siendo muy populares entre los amantes de mascotas exóticas. El galápago de Florida está considerado como especie invasora por el Gobierno español y la Generalitat Valenciana y se ve como una amenaza para la variedad autóctona, aunque su capacidad de adaptación ha hecho que ya forme parte del paisaje y el ecosistema de la marjaleria castellonense y que ya sea difícil concebir estos humedales sin la tortuga de orejas rojas.